AUTOR: Rick Riordan
AÑO: 2010
GÉNERO: novela de fantasía y mitología
VALORACIÓN: 8/10
SINOPSIS
Carter y Sadie Kane pierden a su padre cuando invocó a los cinco dioses egipcios más importantes (Isis, Osiris, Horus, Set y Neftis) y se sacrifica para revitalizar la Casa de la Vida y poder hacer frente al caos que se avecina. Entonces, ambos hermanos se enteran de que provienen de una larga extirpe de faraones, que son los niños más poderosos del mundo y que están deificados (es decir, Horus e Isis habitan en sus cuerpos aunque no los controlan del todo). Con la ayuda de Bast, Amos, Zia y Keops, hacen frente a Set, que está construyendo una pirámide e intentará alzarse y destruir el mundo el día de su cumpleaños. Pero finalmente, los dos hermanos se dan cuenta de que Set no es el verdadero problema.
VALORACIÓN PERSONAL
Me fascina la mitología egipcia casi tanto como la griega, y ese es uno de los motivos por los que me ha gustado este libro. Me parece muy curioso como Rick Riordan personifica y otorga personalidades a los dioses de una manera que, desde mi punto de vista, es siempre muy acertada. También me ha parecido muy interesante el personaje de Sadie Kane, por su peculiar personalidad y porque en algunos aspectos me identifico con ella. El final no era del todo predecible; se podía suponer lo que iba a pasar en general, pero luego la cosa da pequeños giros inesperados, lo que es genial. Está todo muy bien estructurado, por lo que la trama se podía seguir sin dificultad alguna sin llegar a resultarte tediosa.